Esta semana, en Grandes Éxitos de Todos los Tiempos:
Bryan Ferry interpreta ‘Slave to Love – #0028 – Grandes éxitos de todos los tiempos
Bryan Ferry: 'Slave to Love'
Durante mucho tiempo, la canción de Bryan Ferry, ‘Slave to Love’, fue considerada por muchos como un alegato a la servidumbre en el amor de una pareja: algo que parece reflejarse en buena parte del vídeo promocional (dirigido por Jean-Baptiste Mondino) que puedes contemplar en el enlace reseñado más abajo.
Tendría que ser el propio ex-líder de Roxy Music quien desvelara la cuestión en una entrevista: “Es acerca de los sacrificios que un padre (el cantante tiene cuatro hijos con su ex esposa, la modelo Lucy Vogue Helmore) hace por sus hijos”.
Cierto: repasando las imágenes del vídeo podemos ver como Bryan Ferry baila con una niña pequeña hacia el final del mismo, que se supone representa a su hija ficticia para el corto publicitario.
Corría el año 1985 y Bryan Ferry publicaba ‘Boys and Girls’, su sexto álbum en solitario, con el que rompía un silencio de más de tres años desde ‘Avalon’, el último y excelente larga duración de Roxy Music.

‘Slave to Love’, en buena medida, significó uno de los mayores aciertos en la carrera solista de Bryan Ferry
Un disco que significó el canto del cisne para una de las mejores bandas británicas de la década de los años 70, y siete años desde su anterior entrega en solitario, el álbum ‘The Bride Stripped Bare’ en 1978.
El éxito de ‘Boys and Girls’ fue incuestionable, y el hecho de extraer como primer single, el tema ‘Slave to Love’, en buena medida, significó uno de los mayores aciertos en la carrera solista de Bryan Ferry.
El sencillo se editó en abril de ese mismo 1985, alcanzando la octava posición de los charts irlandeses, y la décima en los británicos.
Con un medio tiempo de lo más sensual, la voz suave y sedosa, casi susurrante, de Bryan Ferry, comparte protagonismo con la percusión (durante todo el tema) a cargo de Jimmy Maelen, quien ya se había lucido en el mencionado ‘Avalon’ de Roxy Music.
También es lícito aplaudir el gran trabajo de Jon Carin a los teclados, y el de Tony Levin al bajo, así como el solo de guitarra del canadiense Keith Scott que acompaña el estribillo, y el no menos lustroso solo de guitarra del final de la canción, a cargo de Neil Hubbard.
En muchos sentidos, ‘Boys and Girls’, fue comparado como una hábil secuela de ‘Avalon’, a lo que Bryan Ferry se apresuró a precisar: “Yo no quería que el álbum fuese la segunda parte de ‘Avalon’, pero es cierto que tiene una continuidad en la que al menos 10 de los músicos de ambos registros son los mismos.
Pero tiene algunas diferencias. Siempre se fijan más en mi catálogo con los Roxy como mi cuerpo principal del trabajo, a diferencia de mi carrera en solitario, pero siendo yo el compositor, es lógico que tanto crítica como yo mismo, percibamos que ‘Boys and Girls’ absorbe del sonido y material que escribí con los Roxy”.
Juan Manuel Escrihuela
(Barcelona, 1957)
Comenzó a interesarse por el mundo del rock hacia finales de 1971, de tal manera que fue convirtiéndose en crítico historiador del género en toda su diversidad.
Desde entonces, ha diseñado portadas de libros musicales, redactados artículos y estudios en varias revistas especializadas (Rock De Lux, Rock Spezial, Revoluciones Por Minuto, etc.)
También dispone en el mercado gran cantidad de libros escritos e incluso ilustrados por él mismo: Beatles, ayer, hoy y siempre (Ediciones Hal Leonard, 1983), David Bowie: Agenda (Teorema, 1985), Joan Manuel Serrat (Edicomunicación, 1992), Eagles, el sonido de California (Quarentena Ediciones, 2006) y la única biografía en castellano de Marc Bolan y sus T. Rex: Marc Bolan: El Guerrero Eléctrico de los 70 (Quarentena Ediciones, 2010).
Su primera novela fue El Sueño ha Terminado (Quarentena, 2010), dedicada a los últimos días de John Lennon.